Sigrid se sintió apesadumbrada y dijo: "Cariño... creo que me equivoqué".
George sintió que su corazón se suavizaba un poco cuando escuchó que lo llamaba 'cariño'. Sin embargo, todavía sentía que no podía perdonarla. Si lo hacía, ella volvería a hacerlo.
"¡Mmm!", resopló él para demostrar su descontento.
Los hombres insatisfechos podían ser aterradores. Casi siempre, llamarlo 'cariño' era una forma segura de lograr que George se relajara. ¡Quién iba a imaginar que eso no funcionaría hoy!
Todo apuntaba a que estaría perdida este fin de semana.
Sigrid tembló de miedo. "Reconozco que me equivoqué..."
"De acuerdo, pero no te perdonaré". George entrecerró los ojos y dijo: "A menos que puedas satisfacerme hoy".
Sigrid lo pensó unos instantes y dijo: "Espera un momento".
Ella agarró todas sus cosas y volvió a su cama, corrió las cortinas y luego encendió la lámpara de mesa. Después de asegurarse de que todo estaba bien cubierto por la cortina, sacó su teléfono de la bolsa impermeable, conectó un par de auriculares y se los puso. De inmediato prendió la portátil, inició sesión en la versión de escritorio de Facebook y comenzó a escribir.
Después de charlar un rato con George, decidió seducirlo. Se quitó la chaqueta que llevaba sobre el pijama, bajo el cual solo tenía una delgada camiseta, mientras le hacía una videollamada.
Ese era su límite. No se atrevía a desnudarse más, porque si hubiera un hacker por ahí, podría chantajearla más tarde con el clip.
En eso Rachel, que se metió en su cama después de ducharse, preguntó: "Sigrid, ¿vas a dormir tan temprano?". Ciertamente, era temprano y aun así Rachel vio que Sigrid ya había echado las cortinas, como si fuera a dormir.
"¿Qué? No, no. Estoy viendo una película de miedo. Se siente más aterrador de esta manera", explicó Sigrid con torpeza.
George pensó para sí mismo: "¿Una película de terror? ¿Soy atemorizante?"
En ese momento, George realmente lo era para Sigrid.
Eran alrededor de las once cuando ella terminó su videollamada con George y se quedó dormida.
Como no había clases al día siguiente, Sigrid se despertó cerca de las ocho y ordenó algo de comer para el desayuno. Después se lavó.
A partir del día siguiente rendirían unos tres exámenes por semana. Su profesor les había informado que solo tenían que estar presentes en los exámenes y en la asamblea. Durante ese tiempo, no tendrían ninguna evaluación sorpresa.
Sigrid se sintió encantada al saberlo. Esto significaba que a nadie le importaría si salían a divertirse y volvían tarde. Sin embargo, no se atrevió a contárselo a George.
Si lo hacía, estaría perdida incluso antes del fin de semana.
Después de lavarse, Sigrid todavía estaba en el baño cuando de repente sonó su teléfono. Respondió la llamada y del otro lado de la línea escuchó al repartidor que le decía: "Hola, tu pedido está aquí. Por favor, baja y recógelo".
"Enseguida", dijo y colgó tranquilamente. Luego gritó: "¡Rachel! Mi pedido ya llegó. ¿Puedes recogerlo por mí? ¡No puedo salir en este preciso momento!".
"De acuerdo". Rachel acababa de levantarse. Se había cambiado y estaba lista para salir a comprar el desayuno.
Las muchachas se amedrentaron y salieron corriendo. Rachel les dio la espalda y volvió al dormitorio con el desayuno.
Sigrid ya había salido del baño. Rachel le dejó el desayuno sobre la mesa y dijo: "Acabo de bajar a comprar el desayuno y escuché a dos idi*tas cotilleando acerca de ti y de Rebecca. ¿Cómo es posible que sean tan estúpidas? Había pruebas firmes de que tu hermana tuvo una aventura, pero estas personas siguen diciendo que tú sedujiste a tu cuñado. Es obvio que son unas envidiosas y tratan de manchar tu reputación".
"¡Hasta tuvieron las agallas de decirme que eso era lo que todo el mundo decía! ¡Será mejor que recen para que no descubra quiénes son, o les diré a todos sus nombres y diré que son ladronas! ¡Tal vez se conviertan en eso!"
Al ver que Rachel estaba tan enojada y con las mejillas enrojecidas, Sigrid frunció los labios y dijo: "Aunque es evidente que no soy una p*ta, algunas personas todavía se niegan a aceptar la verdad".
"Todo es culpa de Rebecca. Ella fue la que tuvo una aventura, pero ha estado difundiendo rumores sobre ti por Facebook". Rachel estaba tan enojada que le daba enormes mordiscos a su desayuno.
"¡¿Qué?! ¿Será posible?", preguntó Sharon asomando la cabeza con curiosidad. "¿Eso fue lo que pasó en verdad?"
"¿Por qué crees que Sigrid se casó así de repente? El día de la boda se descubrió que Rebecca y Edward tenían una aventura. Si no fuera por eso, ¡yo habría sido la dama de honor de Sigrid!" Una oleada de ira invadió a Rachel cuando pensó que había perdido la oportunidad de ser la dama de honor de su amiga.
En eso, mirando a Sigrid de un modo extraño, Hannah intervino: "Oh, de hecho, siempre he tenido curiosidad. ¿Por qué tu hermana tuvo una aventura en primer lugar? Sigrid, no nos culpes por interrogarte, pero nadie cree que ella lo engañó. Después de todo, tu esposo y tu exnovio son tan diferentes que nadie imaginaría que Rebecca se interesaría por este".
Sigrid frunció los labios. "Yo tampoco lo sé". No podía contarles la verdad y decir que George solo se había juntado con Rebecca para estar más cerca de ella. Si eso saliera a la luz, todo el mundo pensaría que George era un canalla. Incluso si dijeran que él no quería tener s*xo prematrimonial con Rebecca, de todas formas quedaría mal parado.
Dijera lo que dijera, nada sería bueno para la reputación de George.
Por lo tanto, lo mejor era guardar silencio. Si la gente quería ir tras alguien, que fuera Rebecca. ¡Nadie se metería con mi papi George así como así!
Comentários
Os comentários dos leitores sobre o romance: Amor, Dulce Amor