El Regreso de la Heredera Coronada romance Capítulo 465

—Ingrata.

En el momento en que Vicente se levantó apoyándose con una mano, su esbelto torso se inclinó ligeramente, y su mirada se encontró con la de Ángeles, que estaba en el sofá.

Estaban muy cerca el uno del otro.

En esos ojos oscuros de Vicente, Ángeles vio un destello depredador, con un aura de dominio tiránico y sangriento, lleno de posesividad, como si quisiera marcarla como suya.

Pero rápidamente, Vicente aumentó la distancia entre ellos, revolvió descuidadamente el cabello de Ángeles con la otra mano y luego se levantó para irse.

Esa mirada intensa, esa intención de besarla, parecía solo una ilusión.

Recobrando el sentido, Ángeles se dio cuenta de que, aparte de sentirse nerviosa, había un ligero regocijo en su corazón, como si anhelara que ese beso se hubiera concretado...

Ángeles sacudió la cabeza, despejando esos pensamientos, y se apresuró a traer su computadora. Tras algunos clics, sacó todas las grabaciones de las cámaras de seguridad de la villa.

Las cámaras habían sido instaladas antes de que ella se mudara, cubriendo desde la puerta principal hasta el jardín trasero, sin dejar ningún ángulo muerto.

Ángeles nunca había pensado que padeciera de sonambulismo, pero al revisar las grabaciones, a las tres y veinte minutos y cinco segundos de la madrugada, la vio en pijama y descalza, saliendo de la casa.

Caminaba lentamente pero con determinación hacia adelante.

Ángeles intentó recordar, su último recuerdo claro era haber estado acostada en la terraza disfrutando de la brisa nocturna, sin tener idea de cómo había llegado tan lejos.

Si no fuera por las evidentes grabaciones frente a ella, jamás lo habría creído.

Ángeles frunció el ceño y amplió la imagen en la pantalla.

Durante su episodio de sonambulismo, mantenía los ojos cerrados y todas sus acciones parecían estar impulsadas por alguna fuerza externa, con un aire de resistencia en su expresión.

Ángeles sentía un dolor de cabeza creciendo.

¿Había algo mal con su cuerpo o su mente?

Entre sus ocupaciones, Ángeles no podía evitar pensar en Vicente.

Desde esa madrugada, no lo había vuelto a ver en persona, solo recibía de vez en cuando alguna llamada o mensaje suyo, pero las conversaciones nunca duraban más de un minuto antes de que él tuviera que colgar abruptamente.

El último mensaje de texto había sido tres días atrás, enviado por Vicente: ¿Me extrañas?

A través del teléfono, podía imaginar la expresión traviesa de Vicente al enviar ese mensaje.

Ángeles no respondió.

Pero en momentos de ocio, no podía evitar preguntarse dónde estaría Vicente en ese momento, qué estaría haciendo...

Aunque se esforzaba por controlarse, algunos pensamientos simplemente eran incontrolables.

Ángeles solo podía suspirar y luego ocuparse el doble en otras cosas para desviar su atención.

Histórico de leitura

No history.

Comentários

Os comentários dos leitores sobre o romance: El Regreso de la Heredera Coronada