Rachel continuó: "Esto nos beneficiará tanto a Elizabeth como a mí. Pero tú no vas a sacar provecho de esto. Después de todo, estás casada con George; no te falta nada. Pero de acuerdo al equipo de producción, ¡los fantasmas de este programa son bastante realistas!"
"¡No te preocupes, pues mi belleza repelerá a todos los fantasmas que vengan a hacerte daño!", respondió Sigrid.
"¿De verdad?", Rachel se mostró escéptica.
"¡Sí!", dijo Sigrid riéndose a carcajadas en su cama.
"Entonces, ¿vendrás?", preguntó Rachel.
"¿Cuántos días tendré que estar allí? ¿Y si no puedo actuar bien? ¿Me regañarán?", Sigrid no pudo evitar bombardear a Rachel con una serie de preguntas.
"Probablemente no. Además, te pareces tanto a Elizabeth que los demás podrían envidiarte. Si tenemos en cuenta la duración del rodaje de un episodio entero más el tiempo que se tarda en llegar, nos llevará unos tres días", explicó Rachel con franqueza.
Tras unos momentos de duda, Sigrid finalmente aceptó: "¡Bien! Como mi cuenta de Facebook es privada, no me molestarán los comentarios de odio".
Rachel gritó emocionada: "¡Fantástico! Creo que te pondrán a ti y a Elizabeth en el mismo grupo para despertar el interés del público".
"Creo que acabaré incomodándola. Probablemente seré una molestia para ella", respondió Sigrid, imaginando cómo sería el programa.
"¡Yo también pensé lo mismo!"
En cuanto a ese problema, tanto Sigrid como Rachel optaron por evitarlo.
Aunque existía el riesgo de ser el blanco de comentarios de odio, si la edición posterior se hacía bien, ella no tendría mucho tiempo en pantalla de todos modos. El protagonismo debería recaer en Elizabeth.
La audiencia no prestaría mucha atención a Sigrid. Pero su presencia podría ayudar a Rachel a ganar algo de popularidad, y a ella le pareció una idea brillante.
No obstante, cuando George se enteró de que Sigrid había aceptado participar en el programa, se sintió algo molesto.
Después de la cena, los dos se enfrascaron en otra seria discusión.
"¿Por qué tienes que participar en ese programa? ¡Para ello tendrás que pasar tres días fuera de casa!", le reprendió George.
"¡Intento ayudar a Rachel a ganar popularidad, ya que es la presentadora! Será un viaje muy corto", dijo Sigrid.
"¿Quieres que duerma solo durante tres días?", le preguntó él.
"Um... Son solo tres días".
George se quedó atónito.
Sigrid, por su parte, estaba eufórica. Después de todo, ¡por fin podría descansar durante tres noches! Últimamente, George había sido demasiado entusiasta en la cama, agotándola por completo.
Pero después de recibir el contrato, Sigrid se quedó en silencio al comprobar las fechas de filmación.
Según sus cálculos, las fechas coincidían con su periodo.
Supo inmediatamente que era obra de George. Solo había dos posibilidades: o bien ya era el patrocinador principal, o bien había decidido patrocinar el programa después de saber que ella participaría en él.
Al fin y al cabo, el rodaje tendría lugar durante la madrugada. Estarían allí cuatro días y tres noches, y tendrían que filmar durante tres noches consecutivas. Su estilo de vida dio un giro de 180 grados, ya que sus horarios de trabajo y descanso eran totalmente opuestos a los habituales.
"Hay una pequeña casa en las afueras del pueblo; descansaremos allí esta tarde. Pueden ir a reposar un rato. Alguien los llamará a la hora de la cena. Entonces los pondremos al corriente de algunas cosas importantes. Para este programa, solo tendremos guiones al principio, el resto será improvisado". Un miembro del equipo llevó a Sigrid y a Rachel a una habitación que contaba con dos camas individuales.
La disposición de la habitación era bastante básica, ya que se trataba de un lugar de descanso temporal.
Las chicas entraron, pero estaban demasiado nerviosas para dormirse.
Rachel le entregó a Sigrid un frasco de melatonina. "Tómate una pastilla y vete a dormir. Porque nos vamos a pasar toda la noche grabando".
Sigrid asintió. "Entonces, ¿Qué vamos a comer durante la noche? No puede ser que no vayamos a cenar".
Solo entonces Rachel se dio cuenta de que, efectivamente, se trataba de otro inconveniente. "No había pensado en eso antes. Deberíamos mencionarlo cuando cenemos".
Sigrid estuvo de acuerdo. La melatonina todavía no había hecho efecto, pues aún no se sentía somnolienta. Abrió la maleta y sacó las cosas que llevaría más tarde.
"Dios, ¿Qué te compraste?", Después de que Rachel se tomara la melatonina, miró aturdida el equipaje de Sigrid.
Vio varios objetos en la maleta de veinticuatro pulgadas de la chica. Había algunos rosarios y biblias.
Por si fuera poco, tenía amuletos y cruces.
Sigrid los sacó y le entregó un rosario a Rachel.
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