Amor, Dulce Amor romance Capítulo 159

"Ya veo". Cyrus estaba sorprendido. "Entonces, por favor, cuida a mi hermana".

"¡Claro que sí!". Rachel se palmeó el pecho.

Después de que Cyrus se fue, Rachel regresó al dormitorio. Se sorprendió cuando vio a sus dos nuevas compañeras.

Una de ellas era una chica bonita llamada Alisa Toland, quien había llegado esa mañana. Era la primera vez que veía a Ariel, porque después del almuerzo había ido al salón de baile y no había regresado al dormitorio.

Tan pronto como Rachel entró y vio a Ariel de espaldas, le sorprendió su altura.

Debía medir un metro con setenta centímetros. No solo era alta, también era delgada. ¡Con un cuerpo así, fácilmente podría ser modelo!

Al oír que la puerta se abría, Ariel se giró y sus ojos se encontraron. Rachel estaba un poco desconcertada por la apariencia de Ariel. Se veía muy bien de espaldas, pero ¿por qué su rostro era tan normal?

Su cuerpo era realmente agradable. Aunque era alta y esbelta, su estructura ósea era pequeña y tenía curvas en los lugares correctos. Sus piernas también eran hermosas.

Ariel se ajustó las gafas y se presentó. "Hola, soy nueva. Mi nombre es Ariel Randell".

"¡Hola!". Rachel asintió emocionada. No mencionó que ya sabía que era hermana de Cyrus. Simplemente respondió: "Mañana tendrás tu primera práctica, ¿verdad? ¿Trajiste protector solar? Si no, puedes usar el mío".

"Gracias, pero ya tengo". Ariel sonrió y luego dijo: "Lo siento, pero no sé cómo te llamas".

"Mi nombre es Rachel Miller. Wow, eres muy alta. Has de medir como un metro con setenta centímetros, ¿no?".

"Sí". Ariel sonrió y fue a sentarse. Luego preguntó con curiosidad: "Se está haciendo tarde. ¿Hay otra compañera que no haya regresado?".

"Oh, ella se fue a su casa".

Hannah acababa de darse una ducha y salió del baño. Dijo: "Rachel, ¿quién es el hombre con el que estabas hablando? Se parece mucho a Cyrus Randell. Solo porque estés obsesionada con Cyrus no significa que debas conseguir un novio que se parezca a él. Eso no es justo para él".

Ariel arqueó levemente las cejas.

El rostro de Rachel se puso rojo. Apretó los dientes y dijo: "Todavía no es mi novio y no es un reemplazo". ¡Ese era el mismísimo Cyrus!

Ariel dirigió a Rachel una mirada extraña, luego sonrió y dijo: "Alisa y yo somos nuevas. Por favor, cuídanos mucho".

"Sí", coincidió Alisa con calma.

Rachel la miró y le pareció que la había visto antes en alguna parte.

Eran alrededor de las nueve de la noche. Sigrid acababa de terminar de tener s*xo con George y estaba tan cansada que no podía moverse. George la llevó al baño para que se duchara.

"Quiero que prestes más atención a mis habilidades", dijo George esforzándose por exc*tarla.

Sigrid no supo qué decir. ¿Todavía estaba tratando de vengarse de ella por decir que no era bueno en la cama?

Eran alrededor de las once cuando Sigrid finalmente pudo irse a dormir. Estaba exhausta y sus dedos estaban arrugados porque habían pasado demasiado tiempo en la tina. Le dijo a George ofendida: "Ya no podemos quedarnos en la tina tanto tiempo. No es bueno para la piel".

"De acuerdo". George le besó la frente y vio que sus ojos aún estaban nublados y su rostro seguía sonrojado debido al s*xo de hace un momento. Tragó saliva.

Esta chica siempre tenía una expresión que lo exc*taba. Estaba tan cansada que no quería moverse ni un centímetro. Dijo que quería descansar, pero obviamente todavía estaba tratando de seducirlo con sus movimientos.

George pensó en ello y dijo: "Estás demasiado débil. Deberías hacer más ejercicio para aumentar tu resistencia".

Tan pronto como escuchó que él no estaba satisfecho con su resistencia, ella se molestó y dijo: "¿Cómo que soy débil? ¡Mi resistencia es buena para ser una mujer!". ¿Él pensaba que era fácil seguirle el paso cinco o seis veces por noche?

George la besó en la comisura de los labios y dijo: "Tienes que entrenar".

Sigrid se sintió un poco ofendida. Jaló la colcha con enojo, se acurrucó y lo ignoró.

Todas las noches terminaba agotada y él quería que aumentara su resistencia. ¿De dónde quería que sacara la energía? ¡Todavía tenía las agallas para decirle que era débil! ¡Estaba tentada a comprarle una muñeca inflable!